FRANCISCO REYES / TORONTO /
Los dominicanos residentes en la Gran Área de Toronto (GTA) han sido sorprendidos con una decisión de la Junta Central Electoral (JCE) del país caribeño, que los fuerza a viajar hasta Montreal para poder ejercer el derecho al voto del exterior.
En la mañana del pasado domingo, dirigentes seccionales de partidos políticos de la República Dominicana que realizan labores proselitistas en Canadá se reunieron con miembros de una comisión de la oficina del alto tribunal electoral que funciona en New York, Estados Unidos, para discutir asuntos relacionados con el proceso de votación de sus nacionales en el exterior.
Fue básicamente, para encontrar una solución al problema que confrontan los electores dominicanos en la GTA, quienes tendrán que desplazarse a más de 500 kilómetros para cumplir con el deber de votar en las elecciones presidenciales del próximo 16 de mayo.
Los dirigentes Josefina Suero y Daniel Cocco, del gobernante Partido de la Liberación Dominicana (PLD); José Pérez, Ramón Gómez y José Manuel Martínez, del opositor Partido Revolucionario Mayoritario (PRM); Pablo Díaz, de Alianza País (AP), Henry Samuel, del casi difunto Partido Revolucionario Dominicano (PRD) y otros miembros de dichas seccionales buscaban que la comisión facilitara a los votantes de la GTA el sufragio en esta ciudad, dadas las dificultades que conlleva hacer el viaje a Montreal, donde tendrían que pernoctar, dejando de cumplir con el trabajo y con la familia.
Debido al escaso número de votantes empadronados para poder votar el 16 de mayo, la oficina central de la JCE en Santo Domingo tomó la decisión que, de acuerdo con el consenso de dichosos dirigentes, “es una medida inconstitucional que viola el derecho de los dominicanos de Toronto a ejercer el derecho al voto en el exterior”.
Este derecho de los dominicanos fue establecido hace años para ser ejercido en las elecciones presidenciales del 16 de mayo del 2004, en la que menos de 20 de sus nacionales residentes en esta ciudad sufragaron en una mesa electoral de Montreal, aduciéndose que, debido a la distancia, hubo abstencionismo.
Para facilitar el voto de los dominicanos de la GTA, en el 2008 se facilitó una mesa electoral en esta ciudad, pero aun así la mayoría de ellos, en edad de votar, no participó en los comicios electorales.
En el 2011 se creó un colegio de la JCE en Toronto, pero fue clausurado en enero del 2013 “por el poco interés de los dominicanos residentes en la GTA de participar en el proceso electoral en el exterior.
En vista de la cantidad insuficiente de votantes, unas 54 personas que actualizaron su cédula electoral, de las menos de 500 registradas previamente en la lista de Toronto, la comisión visitante de la JCE vino con el encargo de comunicar la decisión tomada en Santo Domingo, de no establecer una mesa electoral en esta ciudad y, en consecuencia, forzarlos a viajar a la provincia de Quebec, donde existen dos colegios electorales en los que podrían votar.
Josefina Suero, presidenta de la seccional del PLD en Toronto, al ser cuestionada por este medio de prensa sobre dicha medida, dijo que “fue una decisión que perjudica a los votantes de esta zona. Es arbitraria y hubo retención de informaciones con respecto al padrón electoral”.
Agregó que hace meses los dirigentes seccionales entregaron un documento a la JEC en la que hacían una petición para trasladar a Toronto uno de los colegios electorales de Montreal para facilitar el voto en la GTA.
Ramón Gómez y José Manuel Martínez, del PRM, expresaron por separado su descontento con el tribunal electoral.
“Una medida como ésta es no sólo un retroceso a la democracia, sino también una decisión inconstitucional, porque restringe el derecho al voto de los dominicanos en Toronto. Fue una medida vejatoria y preconcebida, dado que la comisión ignoró el documento de petición para mesa electoral y no respondió a nuestra solicitud en el plazo de los 30 días posterior a su entrega, como pauta la ley”, se quejó el dirigente Juan Manuel Martínez.
El consenso también consideró que el Consulado de la República Dominicana en Toronto no actuó en consonancia con la ley, al oponerse a revelar informaciones sobre el resultado del empadronamiento, alegando que era competencia de la JCE.
Los dirigentes denunciaron que personas que nunca se habían empadronado aparecen en el listado de electores y que otras quienes debían actualizar sus cedulas electorales aparecen empadronadas con documentación caducada.
Lo cierto es que menos de la mitad de los casi 15 mil dominicanos que residen en la GTA no está hábil para ejercer el derecho al voto debido a la falta de sus cédulas electorales. Y de los que tienen su documentación al día, menos de 500 se han empadronado debidamente para votar. A esto se agrega la distancia que hay que recorrer hacia Montreal, donde están las mesas electorales, como ocurre con otros colegios electorales de ultramar.