GILBERTO ROGEL / TORONTO /
Es evidente que la comunidad hispano hablante en Canadá ha crecido de manera considerable en las últimas décadas, pero peso a ello todavía no estamos siendo bien visualizados en muchas áreas importantes del país, según lo ratifican los mismos datos oficiales.
El panorama se vuelve aún más difícil ante la cercanía de las próximas elecciones federales programadas para Octubre venidero, según lo ratificó Horacio Tejera experto en temas estadísticos y representante de la organización Latin@s en Toronto, quien desmitificó muchas de las premisas sobre el supuesto crecimiento de nuestra comunidad.
En una conversación llena de mucho humor y amplio debate con los participantes en el curso de la Escuela Cívica (School4Civic Program) del Consejo Canadiense para la Herencia Hispana (HCHC), Horacio Tejera insistió que el punto de partida del problema es que las cifras oficiales tomadas del Censo Nacional del 2016 están incorrectas o mal manejadas en torno al número de personas originarias de los países latinoamericanos que viven en el país.
“Inicialmente hay que tomar en cuenta que muchas personas no les interesa ser contados, ya sea por su situación de estatus legal, por desgano o cualquier otro razón, y si a esto le agregamos que el censo dejó de ser obligatorio con el anterior gobierno Conservador, entonces nuestros números reales tienden a ser menores a lo que se piensa y también menores ante otra comunidades” explicó el profesional de origen Uruguayo.
A criterio de este experto de los números, según las proyecciones oficiales para el año 2020 nuestra comunidad tendrá un leve o mínimo crecimiento porcentual, que en otras palabras significaría que el español en Canadá va a seguir siendo escuchado en muchos lugares pero no necesariamente va a desplazar a otros idiomas que se hablan en el país.
“Lo que estamos viendo es que el Español es uno de los idiomas más estudiado en Canadá y no por chicos con padres de origen hispano, sino por otras comunidades como los inmigrantes Chinos que lo ven como una oportunidad de abrirse campo en otras ramos de negocios, en vista que el español hoy por hoy es el segundo idioma más hablado en el mundo, principalmente en toda la región de Latinoamérica”, ratificó Horacio Tejera.
“Vamos a seguir creciendo en números porque más compatriotas seguirán llegando a las grandes ciudades, principalmente a Toronto y sus alrededores, pero decrecemos porcentualmente porque no estamos al ritmo de crecimiento de otras comunidades cuyas poblaciones cuentan con características muy diferentes a las nuestras como el idioma, la edad, la formación profesional y el nivel de ingreso económico, cuyos miembros tienden a votar más que los nuestros,” afirmó el representante de Latin@s en Toronto.
Otro de los aspectos debatidos en este conversatorio es que a raíz de la tabulación de los datos arrojados por el Censo del 2006 muchas organizaciones que trabajan con la comunidad hispana demandaron y lograron del ente gubernamental encargado de la materia, Estadísticas Canadá, una rectificación de los datos, cuyos resultados pese a ser públicos no alcanzaron una divulgación más amplia y detallada, lo cual hubiera ayudado mucho a tener un mejor visualización de nuestra población.
Sobre este tópico Horacio Tejera también es bastante escéptico al estimar que los criterios del censo seguirán sin variar dramáticamente, ya que esta es la dinámica de la burocracia política canadiense, la cual no prioriza darle mayor visualización política y social a determinadas comunidades, lo que trae como resultado que muchas personas, en particular los latinoamericanos, no les interesa participar de manera activa en la vida política del nuevo país y se resignan a mantener ciertos empleos de subsistencia, lo que en definitiva les imposibilita lograr una incorporación plena a la sociedad Canadiense.
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