
Por Vilma Filici
filici@filici.com
TORONTO. En medio de todos los cambios que se están produciendo en el área migratoria canadiense, un aspecto que por el momento continúa más o menos con la misma tendencia es el referente al flujo de solicitantes de refugio en Canadá. El número de refugiados que está llegando al país ha aumentado considerablemente y sigue aumentando.
Las proyecciones del Gobierno para el 2025 eran de recibir 58,350 refugiados, pero lo que estamos viendo es que solamente entre enero y junio de este año han entrado más de 50,000 refugiados, lo que hace prever que el número de solicitantes de refugio se va a duplicar, y esto no es un incidente aislado.
Porque vemos lo que está pasando en términos globales, a nivel mundial. Hemos visto que en los últimos 10 años el número de personas desplazadas en el mundo se ha duplicado, y en estos momentos hay 123.2 millones de personas desplazadas en las diferentes regiones del globo, y son personas que están siendo desplazadas por las guerras, por las hambrunas, porque están siendo perseguidas por su opinión política o por distintos motivos.
Como digo, se ha duplicado el número de desplazados y refugiados a nivel mundial, por lo que es lógico que también aumente el número de refugiados en los países que aceptan refugiados, como es el caso de Canadá.
En el 2015, cuando el gobierno conservador hizo cambios a los programas de refugio, teníamos aproximadamente 16,000 personas a la espera de su audiencia de refugio, y con la primera llegada de Donald Trump a la presidencia de los Estados Unidos, empezamos a recibir refugiados de dicho país. Y continuamos recibiendo hasta ahora refugiados de los Estados Unidos, pero los cambios en política migratoria que están sucediendo en Canadá, desde el 2024 han ocasionado que el número de refugiados haya aumentado drásticamente, al punto de que en septiembre del 2024 teníamos aproximadamente 249,857 casos de refugiados atrasados en el Consejo de refugiados. Y en julio del 2025 llegamos a 291,000, casi 292,000 casos atrasados.
Considerando que se procesan aproximadamente 50,000 casos al año, se espera que este número va a seguir aumentando, porque lamentablemente hay muchísimas personas que se encuentran en situaciones desesperantes por el hecho de que todos sus planes de poder obtener la residencia permanente en Canadá desaparecieron debido a los cambios hechos por el gobierno canadiense.
Ahora estas personas están pidiendo refugio para poder permanecer en el país, aunque tengan claro de que probablemente no van a ser aceptados como refugiados, pero saben que por lo menos van a permanecer más tiempo en Canadá. Porque para tener una audiencia se van a tardar en promedio cuatro años y medio, y mientras tanto, las personas tienen permiso de trabajo, seguro de salud y todo tipo de beneficios, y la tranquilidad de que no van a ser deportados.
No obstante, esta situación definitivamente va a cambiar significativamente si hoy que regrese de vacaciones la Cámara de los Comunes se aprueba el Proyecto de Ley C-2 (Ley relativa a ciertas medidas relacionadas con la seguridad de la frontera entre Canadá y Estados Unidos y otras medidas de seguridad relacionadas), dado que la misma la van a hacer retroactiva, y uno de los cambios que establece es de que una persona, para poder ser elegible para pedir refugio, lo tiene que pedir durante los primeros 12 meses de haber llegado a Canadá. Esto significa que si piden refugio y ya han pasado más de los 12 meses, no serán elegibles para hacer la solicitud.
Lo que se ha dicho hasta ahora es que la ley la van a hacer retroactiva a junio de este año, y por lo tanto, muchas de las personas que eran estudiantes internacionales o trabajadores temporales y que pidieron refugio, lo más probable es que no sean elegibles para seguir adelante con el caso, lo cual va a disminuir el número de personas que están esperando su audiencia.
Otra cosa que va a cambiar es que las personas que crucen de manera irregular desde los Estados Unidos y pidan refugio en Canadá, tienen que hacerlo en un periodo de 14 días de haber llegado, si no, dejan de ser elegibles para pedir refugio. Esto también va a ayudar a que se disminuya significativamente el número de personas que está pidiendo refugio en el país.
Cuando empezó el incremento del número de refugiados, el gobierno tomó cartas en el asunto, puso más dinero en el presupuesto para el Consejo de Inmigración y Refugio y para la División de Protección y Refugio, tomaron nuevos jueces y más representantes del ministro, etc. Pero eso fue cuando habíamos llegado a 50,000 casos atrasados, y ahora estamos casi en 300,000 casos.
Ahora, el gobierno y el Consejo de Refugiados está tomando otras medidas, como por ejemplo, en algunos casos donde la persona proviene de países donde se sabe que producen refugiados, donde hay mucho abuso de los derechos humanos, etc., están siendo procesados en papel, es decir sin que las personas tengan audiencia. También están haciendo audiencias cortas para países que producen refugiados y de donde hay casos que están bien documentados. Es decir que están tratando de disminuir el número el inventario de casos atrasados.
Pero Canadá sigue teniendo responsabilidades a nivel internacional porque es signatario del convenio de Ginebra del 51, y por lo tanto no puede cerrar el programa de refugio. Además, por su historia de ayuda a los desplazados del mundo, por su actitud humanitaria, tampoco es factible que se corte el programa de refugio.
Pero la realidad es que en la actualidad no solamente hay problemas con el número de refugiados que están entrando, sino que también con la percepción de la ciudadanía canadiense, muchos de los cuales están totalmente en contra de que se sigan aceptando y ayudando a los refugiados. La opinión pública está dividida entre los que quieren seguir ayudando a los refugiados y los que piensan que estas personas están abusando del programa de refugio y de la bondad de los canadienses.
Lamentablemente las redes sociales están súper activas en contra de inmigración y en contra de los refugiados, y hay mucha información que está tergiversada en cuanto a la ayuda que se les da a los refugiados. En la próxima columna vamos a hablar acerca de qué ayuda se le da al refugiado realmente, porque hay algunos posts donde dicen que los refugiados están recibiendo mucho más dinero que los pensionados canadienses, y ponen cifras extremadamente altas que no son verdad, lo cual influye en la percepción negativa que está teniendo la ciudadanía sobre los refugiados.
Cierro esta columna diciéndole a las personas que quieran pedir refugio, que hagan consultas con un especialista en el tema del refugio, y que vean si en realidad su caso podría ser aceptado. Y que también consideren que, si han estado en el país por más de un año y van a pedir refugio, ahora existe la posibilidad de que sean procesados bajo la nueva Ley C-2 (Ley relativa a ciertas medidas relacionadas con la seguridad de la frontera entre Canadá y Estados Unidos y otras medidas de seguridad relacionadas) una vez que está sea aprobada e implementada, y por lo tanto tienen que pensarlo dos veces si van a seguir con la idea de pedir refugio.
Porque si no son elegibles para pedir refugio, lo más probable es que las autoridades pongan en acción la orden de salida condicional que se les dio en el momento de haber pedido refugio, y por lo tanto lo máximo que podrían llegar a obtener es una revisión del caso para ver si corren riesgo al ser regresados al país de origen, y esta revisión no es hecha por el Consejo de Refugiados sino que por oficiales de inmigración.